Pueblos del alto Jarama
La sierra del Rincón es un laberinto de valles, barrancos, ríos, bosques, montes y praderas. En lo más alto de la sierra, nace castellano el río Jarama atravesando parajes tan idílicos y solitarios que cuesta creer que la gran urbe de Madrid solo esté a cien kilómetros. Los primeros pueblos que baña sus aguas son El Cardoso de la Sierra, arriacense, y La Hiruela, madrileño; proponemos unir ambos con una excursión circular que toca de refilón el lugar más famoso de todo el territorio: (el afamado y restringido) hayedo de Montejo.
A las faldas del vertiginoso alto de Bañaderos, rodeado por los Picos de La Morra de la Dehesa y Cabeza del Burrial, en un accidentado terreno que discurre entre bellos prados y robledales, se extiende el municipio de La Hiruela.
La Hiruela no es un lugar cualquiera, es un pueblo singular. Un enclave privilegiado de la Sierra del Rincón.
Sus casas de piedra, adobe y madera de roble de la dehesa, apenas han sufrido modificaciones en su estructura desde su construcción, lo que confiere a La Hiruela una identidad arquitectónica propia que lo sitúa como uno de los pueblos mejor conservados de la Comunidad de Madrid.
Con un acertado criterio, está prohibido el paso de coches salvo para los vecinos, y se han habilitado varios aparcamientos a la entrada del pueblo que pueden completarse algunos fines de semana. Desde este aparcamiento acertaremos a ver el famoso peral de La Hiruela. ¿Qué por qué puede ser famoso un peral?
Hace unos doscientos años, a un hiruelano se le ocurrió plantar un peral, árbol frutal que no se conocía en la zona. El peral creció y el éxito de sus peras fue tal que se plantaron perales en toda la zona, aunque ninguno alcanzó el desarrollo y la longevidad de este ejemplar que aún hoy sigue dando unas peras tan ricas que hasta tienen una jota propia en el cancionero popular de la comarca. Este árbol no sólo es el peral de mayores dimensiones de la Comunidad de Madrid; también ostenta el récord de uno de los mayores de España.
Entramos en el pueblo y poco después de dejar atrás el famoso peral, cuando la calle se bifurca tomamos la calle del Pilón y, después la calle de la Reserva de la Biosfera buscando el inicio de la senda de las Eras, un sendero protegido por barandilla.
...que ha de conducirnos a un pequeño mirador instalado sobre el pueblo.
El sendero continúa ganando altura y así llegamos a un amplio prado donde se encuentra el helipuerto que da cobertura sanitaria y de emergencias a esta zona de la Comunidad de Madrid.
Cruzamos la carrtera y seguimos ascendiendo reconfortados por el pensamiento de que la práctica totalidad del ascenso de la ruta se acomete en estos primeros kilómetros.
Llegamos a una cabaña de madera situada en un lugar fantástico para admirar todo el paisaje y que no es otra cosa que un retén de los bomberos.
Tenemos ante nosotros unas inmejorables vistas del Pico Calahorra o Santuy, y a sus pies el pueblo de El Cardoso de la Sierra.
Continuamos por la pista que sale a la derecha de la cabaña y que baja en suave pendiente, lo que se agradece después de la fuerte subida que hemos hecho.
Llegamos al Puerto de El Cardoso, cruzamos la carretera y continuamos caminando por unos extensos prados, pocos metros después cogeremos un desvío a la derecha y nos internamos en un bosque.
La pista sigue perdiendo altura por el valle del arroyo de la Maleza, bordea una loma y después llanea hasta el puerto de El Cardoso. A otro lado de la carretera continúa la pista que sigue guiando nuestros pasos por unos extensos prados rumbo a una granja.
Vamos dejando a la izquierda varios caminos hasta llegar a una bifurcación. Continuamos por el ramal de la derecha que "acaricia" el borde de un denso bosque. En breve llegamos a un cortafuegos y a la pared que delimita el hayedo de Montejo. Es hora de abandonar la pista y comenzar un brusco descenso que no tiene una senda definida que nos conducirá a la puerta del hayedo de Montejo, una pequeña y rara joya natural que representa los restos de la vegetación caducifolia centroeuropea en España.
Estamos en la Puerta del Hayedo (para tener más información sobre el Hayedo y las visitas, pulsar AQUÍ). Popularmente se suele afirmar que este hayedo, uno de los más estudiados de la península ibérica, es el más meridional de toda Europa, pero no es cierto, ya que no es ni siquiera el más meridional de España, título que corresponde al hayedo de Retaule en Tarragona. Este bosque es un Espacio Natural restringido que solo puede visitarse por sendas guiadas que han de reservarse con mucha antelación.
Cruzamos el Puente sobre el río Jarama y ahora nosotros decidimos hacer un alto en este entorno para almorzar al lado de un pequeño arroyo.
Ahora tenemos que abandonar el asfalto por una pista que comienza a la izquierda y que trepa por la ladera cubierta de robles. A unos trescientos metros la pista desemboca en otra que, procedente del norte, discurre paralela a la carretera y que utiliza el GR 88, como advierten las familiares marcas blancas y rojas.
En el casco urbano destaca la iglesia de Santiago Apóstol del siglo XI, y una fuente hecha de granito, roca que no existe en este territorio. El pueblo cuenta con bar donde podemos reponer fuerzas.
Salimos del pueblo por el camino de la ermita de San Roque y continuamos por unos prados, en los cuales podemos utilizar el tendido telefónico y las señales de un PR para no perder el rumbo.
El camino se estrecha y se convierte en una senda que avanza paralela a una rústica valla de piedra cubierta de musgo que nos acompañará hasta el río Jarama, cuyo cauce cruzaremos por un funcional puente de madera.
Al otro lado, en lugar de seguir las indicaciones, tomamos una senda a la izquierda que va junto al río y que une los molinos de El Cardoso, (en ruinas), y de La Hiruela.
A estas alturas del año no hay ninguna cobertura en los árboles, no me quiero imaginar como será este tramo en primavera o mejor aún en otoño. Prometo volver en otra ocasión, si ahora el paisaje es bello, entonces será extraordinario.
Algo más adelante volvemos a cambiar de margen por otro puente de madera.
El sendero se complica y hay que pisar con tiento para no resbalar en las piedras húmedas.
Así llegaremos hasta otro pequeño puente por el que accedemos a la espléndida área recreativa del molino de La Hiruela.
Este molino harinero, del que se tiene noticias desde el siglo XVII, funcionó hasta 1975.
El edificio se arruinó y fue restaurado en 2001.
Nos ha parecido muy bonita esta área recreativa, con sus mesas y el río a escasos metros.
Las casas de La Hiruela se insinúan sobre nuestras cabezas. Se puede llegar a ellas sin tocar asfalto gracias a un sendero acondicionado que hasta tiene escalones en los tramos más empinados para evitar resbalones.
El bonito camino llega hasta la plaza de La Hiruela, que preside la iglesia de San Miguel Arcángel.
Solo nos queda recorrer unos pocos metros por las encantadoras calles del pueblo para llegar al punto en el que comenzamos la ruta.
Espero que os guste!
Distancia: 16.9 Km
Desnivel subida : 490 m
Desnivel bajada : 490 m
Altitud máxima : 1483 m
Altitud mínima : 1172 m
Tiempo total : 7:04:28 h
Dificultad: Moderada.
Javier si no has subido por el cordal del Bañaderos hazlo, un recorrido muy interesante con buenas vistas. Bonita ruta. Un saludo.
ResponderEliminarHola Rafa R.
EliminarGracias por pasarte por aquí y comentar, no he ido por el cordal que comentas, de hecho era una de las primeras incursiones que hago por la zona, pero prometo volver.
Saludos!